VUELTA A LAS PALABRAS

Y volvemos a las palabras. Antes era el uso que hacíamos de ellas, hoy al particular punto de comprensión que tenemos de ellas como conceptos.

 

Entiendo que cada persona, tiene su personal interpretación de cada palabra-concepto, resultado de lo aprendido y de su propia experiencia. Es su punto de visión y de comprensión a partir del cual formula sus opiniones, construye su vida e influencia en su entorno.

 

Una de las funciones de la mente, es la de servir de puente o herramienta para comunicarnos con el mundo exterior-personalidad y nuestro mundo interior-espíritu. Une Espíritu y Personalidad. Y, así como tenemos nuestros puntos débiles a nivel de sentimientos-emociones, también hay puntos débiles a nivel mental, puntos que van unidos a nuestra personal interpretación de la vida definida en palabras.

 

 

Cuando una personalidad no es consciente de quien es y cómo es, entonces vive a espaldas de su Ser, tiene puntos débiles. Un punto débil puede ser una herida emocional, una mala interpretación, una experiencia no asimilada, muchas cosas, pero crean una emoción y una actitud mental no sana, que equivale a una pared que impide la entrada al corazón o contacto con el Ser.

 

Así entiendo que tan importante es sanar las emociones, como ordenar la mente para poder ser realmente quienes somos en Esencia y en Personalidad.

 

Una forma de ordenar la mente es comprendiendo y una forma para comprender es reflexionar con total sinceridad. ¿Qué función tiene reflexionar? Redirigir la mente a través de la atención hacia los puntos concretos en que puede darse la comprensión y como consecuencia posibilitar el cambio hacia un nuevo estado de ser-conciencia.