martes, 11 de diciembre de 2018

REVISION DEL AÑO

                             



De todos es sabido que nuestra vida esta señalada por ciclos de tiempo que representan etapas de crecimiento por los que hemos de pasar, pues marcan el ritmo de nuestro crecimiento personal y evolución espiritual. Los veo como el envoltorio de las Leyes Universales.

Son unos ciclos que nos afectan a todos por igual, seamos Espíritus nativos de la Tierra o vengamos de las estrellas,  y que al tomar conciencia de ellos nos permiten colaborar conscientemente en el proceso, sacando de ello el mayor provecho con el menor sufrimiento posible. Sólo hay que tener voluntad y compromiso.

Sobre estos ciclos generales hay que añadir los ciclos personales que cada persona trae consigo al nacer y que están motivados por la experiencia y aprendizaje que busca el Espíritu en su ciclo de vida.

Pues bien, ahora nos hallamos al final de un ciclo corto general para todo el mundo como es el cambio de año. Cada año lleva una energía diferente. Es decir trae consigo un aprendizaje determinado que nos inclina hacia un determinado tipo de experiencia o vivencia que nos tiene que reportar un determinado aprendizaje. Si éste aprendizaje ya lo tenemos hecho e integrado, nada nos afectará y el paso del año será suave y fácil, pero sino lo tenemos aprendido e integrado nos hallaremos en situaciones donde si queremos avanzar, tendremos que asumir ciertos aprendizajes, limpiezas, reconocimientos, sanación, siempre en la medida que podamos asumirlo. El cielo nunca nos da una prueba o reto que no podamos  superar.  Pero si no queremos avanzar por resistencia a pasar por el proceso, nos vemos o sentimos entonces como relegados o rezagados en la evolución. Es decir el Universo, la Vida, se hace a un lado y espera a que nosotros estemos preparados para seguir avanzando. No nos obliga, espera simplemente. En ese esperar nosotros nos sentimos solos. Y es en esa soledad que nos hacemos fuertes para seguir el camino trazado. Así es que la soledad es una elección que hacemos inconscientemente pero al mismo tiempo una herramienta que un día u otro nos pone en marcha otra vez. Sea en esta vida o en otra. Según el plazo de tiempo que nos dediquemos a esperar, creyendo que así eludimos la prueba, el paisaje de nuestro entorno puede variar, las personas pueden desaparecer y aparecer otras nuevas, las situaciones también. Con lo cual el color de la soledad cambia.

Así pues, siempre recomiendo hacer un trabajo de introspección profundo en estas fechas, para tener claro y tomar conciencia de donde estamos, qué nos falta y a donde vamos. Eso facilita mucho el avance y conexión con nuestro Espíritu y de resultas de ello con el Universo.

Así que paso a describir el ejercicio para quién desee hacerlo. Debe hacer por dias, es decir cada fase se hace en un día. Total lleva 6 dias  seguidos hacerlos.

Primer día.- Se repasa todo lo vivido durante el año y se anota y sin leerlo lo escrito se guarda.  Si hemos adquirido la buena costumbre de llevar un diario ahora es cuando nos será de gran ayuda.

Segundo día.- Se reflexiona de cada experiencia que hemos tenido cómo la hemos vivido, cuál ha sido el aprendizaje obtenido, a nivel físico-material, a nivel emocional, a nivel mental y a nivel espiritual. Y se llega a la conclusión de si es un espacio cerrado o queda abierto con más aprendizajes a hacer aunque no sepamos cuales, sí lo sentiremos en nuestro corazón. Nos sentiremos satisfechos o inquietos. Se guarda la hoja sin leerla. 

Tercer día.- Se lee todo y se  reflexiona sobre ello,  se hace una lista de lo que queda incompleto y lo que sentimos completo. Se guarda la hoja.

Cuarto día.- Se vuelve a leer todo y se llega a la  conclusión del año. Se cierra el año sintetizando que hemos aprendido a nivel físico-material, a nivel emocional, a nivel mental y a nivel espiritual. Debe hacerse de forma sintetiza, clara y concisa. No nos perdamos en  palabrería.

Quinto día.- Se fijan unos objetivos para el próximo año, a todos los niveles, físico-material, emocional, mental y espiritual.

Sexto día.- Y por último, se escoge un jueves o un domingo y después de la meditación matutina, perfectamente interiorizados, unidos a nuestro Ser;  se lee en voz alta la conclusión del año y los objetivos, en ofrecimiento al Universo pidiendo Luz y Guía para nuestro caminar.

Quiero aclarar que la Luz y Guía del Cielo siempre está, pero a veces ocurre, que no viene como nosotros quisiéramos que viniera, sino en otra forma, la forma que más nos conviene a la evolución de nuestro Espíritu. Es decir la Luz y la Guía es para nuestro Espíritu no para nuestro ego. Por eso algunas personas dicen que “a mi el cielo no me escucha”, entonces es que la personalidad no quiere enterarse.

Os deseo a todos un feliz final de Año y un Gran Nuevo Año, que viene lleno de experiencias y contundencia. 

Un gran abrazo a todos, de corazón.



lunes, 3 de diciembre de 2018

Calendario de encuentros de Enero a Junio 2019

   

FECHAS DE ENCUENTROS DEL AÑO 2019
DE ENERO A JUNIO.

El grupo de encuentros de “Barrufets”, es para aquellas personas que sólo quieren venir un día o bien no han podido asistir a su encuentro de “corazones”. Espero que quién lo desee pueda encontrar su lugar.


ENERO:                                           FEBRERO:
Barrufets: dia 12                              Barrufets: dia 9
Corazones: dia 19                             Corazones: dia 16

MARZO:                                           ABRIL:
Barrufets: dia 16                               Barrufets: dia 13
Corazones: dia 23                             Corazones: dia 27

MAIG:                                              JUNIO:
Barrufets: dia 11                               Barrufets: dia 8
Corazones: dia 25                              Corazones: dia 22



CONVIVENCIAS EN LLANÇA:

MARZO: Dias 29,30,31  (sólo quedan tres plazas)
No se trata de ningún taller de trabajo. Se trata de sólo convivir un grupo de amigos, hablar, pasear, comer, jugar, descansar, relajarse, lo que venga de gusto. Por lo tanto el precio cambia ya que solo se cobra lo que vale la casa y luego la comida. Precio: casa + comida = a unos 120 € persona. La casa sale por 82€ más la comida que se organizará entre todos.

Si se quedan personas con ganas de ir se puede programar otra convivencia para el primer fin de semana de Mayo.

 Se ruega que, en el próximo encuentro que hagamos en Celra, se abone al menos la mitad del precio, para así poder cubrir los gastos de reserva.

Maria Angels Busquets
610990622






miércoles, 7 de noviembre de 2018

11-11-11

                                         



11-11-11

Entiendo la evolución cómo si fuera una escalera que va  discurriendo entre paisajes variados. A veces son monótonos y a veces divertidos, a veces el paisaje está lleno de retos y obstáculos y a veces de facilidades.  Nos encontramos con climas suaves y climas extremos. Caminando, corriendo o volando subimos poco a poco.  Cada peldaño que sube se corresponde a un estado de conciencia más elevado. A una expansión, trabajada,  de conciencia.

En esa escalera existen periodos de tiempo que llamamos ciclos. Cortos, largos, otros de cortos dentro de los largos. Nuestra mente así lo entiende porque necesita, mientras esta aquí en la tierra,  tener un marco de referencia para entender el concepto tiempo y en esa referencia organizar nuestra vida practica.  

Sin embargo el concepto tiempo tal como nosotros lo vivimos sólo existe para nosotros. Por lo tanto nuestra mente no puede poner un marco de referencia al concepto tiempo fuera de nuestra realidad 3D. Y eso nos puede confundir y dar por sentado, ciertas verdades que sólo lo son para nosotros.

Sin embargo hay que saber que dentro de estos ciclos, existen ciertos períodos, muy cortos, durante los cuales las conciencias, nuestras conciencias, pueden dar verdaderos saltos hacia adelante. Es decir, subir un peldaño en la escalera evolutiva. Existen puertas o puntos de conexión entre diferentes estados de conciencia que así lo permiten.

Cuando un ciclo se cierra, llega al punto cero, automáticamente cambia de dirección y se abre hacia la dirección contraria. Luego es que empezamos un nuevo ciclo. Uno se cierra y la misma energía vuelve a abrirse en dirección opuesta.  Por lo tanto uno es limitativo y otro es expansivo. Cambiar de dirección significa subir un peldaño.

Estas puertas o puntos de conexión se abren cuando un gran ciclo se dispone a cerrarse, para abrirse de nuevo en fase expansiva.

Pronto, vamos a conocer la rara oportunidad de franquear un importante umbral interior si nos mostramos resueltos en nuestras aspiraciones y en nuestros compromisos. Este paso se debe hacer tanto individualmente como colectivamente. Ya que uno a uno formamos el cuerpo global de la especie humana, que de una forma u otra debe limpiarse y prepararse para acceder al movimiento natural al que estamos invitados.

Por eso estamos en un tiempo de resolución de karmas, es el efecto de cerrar un ciclo. Particularmente propicio a la manifestación de karmas inmediatos.  El pasado resurge con una fuerza impacable, aquello que no queríamos ver, que no queríamos enfrentar, aparece en nuestra vida. Asuntos sin resolver exigen resolución. No se trata de ningún castigo, ni autocastigo, es sencillamente solucionar y dejar, soltar, pero a través de haber tomado consciencia, todo aquello que nos puede dificultar el acceso al peldaño superior.

Todo lo que hacemos hoy, en el presente, o viene del pasado o es consecuencia de lo que estamos sembrando, todo explota de forma casi instantánea. Ya nada se puede acumular. El viaje debe iniciarse sin equipaje, con lo puesto.

En cuanto el ciclo de tiempo empieza a abrirse de nuevo, los karmas constructivos y unificadores se manifestarán con una fuerza sorprendente y extrema rapidez, como si una profunda inspiración volviera a darnos vida tras un periodo de asfixia.

Esto está sucediendo ya, se esta cerrando el circulo. ¿Cuándo se cerrará del todo? Cuando volverá a abrirse? Cuando el ciclo que aun vivimos llegue a cero. Como una espiral que llega a cerrarse en el interior y luego se da la vuelta y empieza a abrirse de nuevo. Se dan fechas, datos, posibilidades, tanto a nivel científico, como a nivel espiritual. Sin embargo la precisión en el tiempo exacto yo no lo veo posible porque el concepto de tiempo por el que nos movemos no corresponde al tiempo cósmico. Pero cerca, muy cerca andamos. Lo que vivimos en nosotros y vemos que ocurre a nuestro alrededor nos indica que el cierre esta cerca.

Este será pues un gran portal de ascensión. Ello no significa que las personas de pronto nos iluminemos y tengamos ciencia infusa, no, continuaremos siendo quienes somos, es una cuestión de conciencia, de voluntad y compromiso, donde nuestros esfuerzos por avanzar se verán apoyados, sostenidos.

Un portal preparatorio es el que se abrirá el día 11-11-11. 2018 sumado da 11. Es nuestro concepto del tiempo marcado en el calendario. Pero no olvidemos que ese calendario no tiene nada que ver con el tiempo cósmico. Por lo tanto, desde este momento, hasta finales de mes, tengamos conciencia y colaboremos en la eliminación de aquello que nos sobra. Y tomemos conciencia de nuestra voluntad y compromiso de ir hacia adelante pero demos una dirección a nuestra vida. ¿Qué quiero hacer con mi vida? ¿Qué proyecto quiero realizar?. Solo con saberlo y tener la voluntad y compromiso de seguirlo es suficiente, el cómo se hará vendrá con la apertura del ciclo nuevo.

Con mis mejores deseos
Maria Angels.





 

martes, 23 de octubre de 2018

Sintesis de un mensaje del cielo



                             





LA VIA DEL CORAZON.  Mensajes del cielo.

 “Final de un ciclo de 26.000 años y otro de 12.000 años.
Estos dos ciclos conectados entre sí crean aberturas muy importantes en vuestro entorno planetario. Algo así como accesos a través de los cuales podeis extraer una comprensión diferente de todo nuestro funcionamiento actual, en todos los planos, del más sutil al más denso. Es también un momento en el que grandes ejes de comunicación sutil se abren en cada ser que se ponga a la escucha.

La civilización actual ha venido con el objetivo esencial de abrir la vía del corazón.

Incluye: la sonrisa, la compasión, la escucha, el respeto, el no juicio, la ternura, la unidad. Pequeños estallidos de la palabra Amor. El cultivo de los atributos femeninos.

 Ofrece la oportunidad de contactar con seres y situaciones que habéis dejado atrás, sin resolver, de vidas pasadas.

Una parte de vosotros que se aflige por los obstáculos que
 encuentra en su vida, de alguna forma antes de venir, ya han firmado un pacto de amor con la parte más bella de vosotros mismos. Un pacto de aceptación de esta gran limpieza en todos los plano, a fín de reencontrar la esencia de vuestro ser, vuestro propio corazón, que sólo pide abrirse y respirar con más amplitud.  

 Si los Seres de la Tierra dejáseis de pensar que vuestra vida depende de los acontecimientos y encuentros externos a vosotros, si dejáseis de esperar ayuda del prójimo, si aceptárais nuestro rol de creador sin orgullo ni culpabilidad, entonces se daría un gran paso para esta humanidad.

Cada uno atrae hacia sí los seres y acontecimientos que no son más que otras facetas de uno mismo. Mientras el hombre luche contra esa evidencia, mientras no acepte ver en el otro su si mismo una oportunidad de comprenderse y conocerse mejor, la vida le parecerá eternamente difícil.

 Aceptación es la clave.
Dejar de actuar no tiene fundamento, pero reaccionar tampoco es la clave de la evolución.
Actuar únicamente es lo que haces en función de tu ser profundo y verdadero y no en respuesta de lo que hace o dice otro.

 La pasividad significa que todo depende del exterior, mientras que la aceptación abre las puertas de las grandes leyes universales, las que nos dicen que es más importe modificar la mirada sobre lo que  ocurre, que cambiar el acontecimiento en sí, ya que es la mirada interior la que modificará el acontecimiento exterior.

 La humanidad esta a la búsqueda de su propio corazón, porque aún no han encontrado el Amor. Buscais incansablemente fuera de vosotros mismos lo que tan solo podreis encontrar en vuestro interior. Deseais ser amados por los demás, y estais dispuestos a toda clase de compromisos para lograrlo, sin daros cuenta de que sois incapaces de ofrecernos a vosotros mismos lo que tanto buscais en el exterior.

 Jesús dijo  “ama a tu prójimo como a ti mismo” fue muy claro.

 Nadie puede amar si antes no se ha hecho este regalo a si mismo. Amarse no quiere decir considerarse más que cualquier otro, sino concederse la misma atención, respeto, ternura, benevolencia que concedeis a los que amamos.

Es muy difícil tender una mano a alguien sino se ama esta mano.

Habeis venido para aprender a sonreír, para aceptar lo que sois y amaros para poder amar mejor.

 Cada vez que un ser humano se alza en su interior, abre su corazón y sus brazos, se acepta, derriba sus propias barreras y da un paso hacia adelante, centenares de otros humanos dan esto mismo junto a él.

 El otro es la parte que os queda por descubrir, por amar y comprender de vosotros mismos.

 El Amor es algo diferente a lo que conoceis en la tierra. No cambia el hilo de nuestras emociones. En otros planos más elevados,  no es posible amar apasionadamente y después odiar a la misma persona.
Cuando se ama, cuando escogemos a alguien, es por un reconocimiento mutuo. Decidimos hacer nuestra vida con un ser del sexo opuesto, pero nunca escogemos por necesidad o por carencia.

 Lo que nos atrae hacia otro ser no puede venir de algo exterior a nosotros, ni por educación, ni por obligación, ni por carencia que busquemos colmar desesperadamente, por hacer como los demás, o sólo por pulsaciones momentáneas, tal y como vemos que sucede entre vosotros.

 Pensad en lo que es el Amor de pareja si aceptarais por un instante abrir vuestro corazón en vez de enmascarar vuestras carencias y necesidades bajo la apariencia del Amor.

Vemos a menudo como en vuestras relaciones de pareja, el otro está únicamente ahí para colmar las necesidades y las carencias de su pareja. Eso es una proposición de encarcelamiento.

Cuando aquí elegimos vivir juntos, somos conscientes del respeto y de la libertad que nos comprometemos a mantener el uno en el otro y el uno por el otro. Aquí la libertad no significa actuar sin el otro o a costa de los demás. Nuestro sentido de la libertad concierne más a la integridad, al respeto profundo hacia nuestro compañero y hacia el Amor a la Unidad de la Vida.

 El hombre y la mujer no son opuestos sino complementarios. Por la unión de sus cuerpos, de sus Espiritus crean la Vida, la unión de su amor es creación y a imagen de Dios crean, sea cual sea el plano en que lo hagan.

El amor fisico nunca viene solo y permite recuperar la divinidad a cada una de nuestras celulas. A través de las caricias, de los besos y las palabras hacemos florecer lo que hay de más bello en cada uno y entonces lo que llamamos defecto se vuelve cualidad. Todo, absolutamente todo tiene belleza y el que se ve bello en la mirada del otro, es inmediatamente bello. El Amor fisico cuando va acompañado del Amor hacia un ser y hacia la Vida conduce a lo más sagrado que hay en nosotros, la Divinidad.

 Pero para ello hace falta compromiso. Compromiso que debe ser absoluto, completo en todos los planos. Alcanzar el éxtasis, la Divinidad requiere de una presencia y un amor total.

 Ofrecerse al otro es abrirse sin temor a ser herido, es ser vulnerable y alcanzado. Ello requiere una gran confianza y fuerza interior para que se produzca el abandono del uno en el otro.

Entre nosotros no hay divorcio porque no hay matrimonio. Eso solo existe en la Tierra. El otro no nos pertenece.

 Entre nosotros la separación de dos seres se produce cuando han terminado lo que habían previsto realizar juntos. Y en ese momento el Amor que los une puede reunirlos para otros ciclos de experiencia o creación. O bien uno y otro se encaminan hacia un futuro diferente. Ello no ocasiona ningún desgarro, ni herida, porque en ese acto no hay enfado ni agresividad, ni sentimiento de fracaso o desvalorización.

 Todo lo que creáis con Amor, por Amor y con conciencia es una verdadera iniciación. El resto son suposiciones y palabrerías.”



martes, 16 de octubre de 2018

Y SIGUE LA TRANSFORMACION




Parece como si todos los días fueran iguales, pero no lo son. Parece como si el mundo no cambiara, pero sí cambia. Parece como si la Tierra, el Sol y los planetas no se movieran, pero sí se mueven. Es un tópico decir que todo cambia. Sí, verdad?, es repetir más de lo mismo, porque todos sabemos que todo cambia, que nada es estático ni nada es para siempre, que la energía cambia e incluso sabemos que cambia a ritmo de nuestro pensamiento.

La transformación de la oruga en hermosa mariposa sigue su camino imparable, poco a poco va completando sus etapas de metamorfosis. Pero ¿Cuál es la actual? ¿Qué pasa ahora?

A finales de Agosto, al término de los eclipses, cerramos una etapa y a primeros de septiembre empezamos a recibir la irradiación de una nueva frecuencia. Sabemos que en cada subida de frecuencia somos sutilmente estimulados a avanzar en nuestra evolución.

Esta etapa que vivimos ahora podría calificarla como “determinación y contundencia” o como “transparencia”. La Tierra-Gaia ha subido con determinación y contundencia su frecuencia vibratoria. Cuanto más alta la frecuencia menos densa, menos presión ejerce siempre que pueda fluir libremente. Pero es lo suficiente contundente para desbloquear todo lo taponado, para mover todo lo retenido,  para sacar a la luz del día todo lo oculto en la oscuridad de nuestro interior. Para sacar a la luz la verdad de nosotros mismos.

La Madre Gaia y el Padre Cielo ya no esperaran más nuestras justificaciones, nuestras demoras en el buen hacer. Es el sí o sí, es el partir de viaje con lo puesto, no hay tiempo de hacer la maleta.

Así vemos lo peor de las personas y lo mejor de ellas. Así sale de nosotros las debilidades y las fortalezas. Así el mundo se ve como parte de un basurero y otra parte brilla como las más hermosas de las joyas. Tan pronto nos sentimos mecidos por ondas de amor y gratitud, como entramos en torbellinos emocionales. Tan pronto nos sentimos a merced del viento de nuestros peores pensamientos, como sentimos que nos enderezan con firmeza.

Es el momento en que debemos elegir, ¿Qué quieres formar parte de la Luz o de la no Luz? Qué eres Luz o oscuridad?.

El camino de la no Luz es el más fácil. Porqué no quiere que te responsabilices de nada, no quiere que pienses por ti mismo, no quiere que hagas elecciones, no quiere que tengas voluntad. Quiere que odies, que guardes rencor y te rías del amor. Que el orgullo y la pereza sean tu bandera. Sólo quiere que te dejes  esclavizar pues en ello consolida la desunión, la separación, del ser humano y su  divinidad. La separación de todos los reinos de la naturaleza. Así detiene la evolución.

El camino de la Luz  es el más difícil, te pide que venzas la inercia,  que seas responsable tú de tu vida y de las consecuencias de tus elecciones, de tus pensamientos, de tus palabras, de tus sentimientos y que mantengas tu mente y tus emociones perfectamente limpias y equilibradas. Que puedas mostrarte con transparencia, sin vergüenza, sin culpa, con gratitud y humildad. Que labres tu carácter. Que el ser humano reconozca, acepte y se una a su divinidad, que se rinda a su divinidad, que se sienta parte y unión de todos los reinos y con ello Todo avance en la evolución.

El camino de la no Luz es tierra quemada, infértil, toxica. El camino de la Luz es tierra fértil, abonada por las experiencias de la vida, regada con el amor y la bondad, sembrada con la voluntad del servicio a los demás y del crecimiento propio.

¿Cuál camino eliges? Nuestra es la responsabilidad de la elección y sus consecuencias.

María Angels.













viernes, 5 de octubre de 2018

EL TESORO

                                                     





Quiero que imagines un tesoro que ha estado perdido durante cientos de miles de años en las profundidades del océano. Ha estado allí, incrustado cada vez más con crustáceos, hasta que su belleza original queda totalmente irreconocible.

Entonces, finalmente, es descubierto por un buscador de tesoros y traído a la superficie. Se ve completamente inservible. Alguien sin conocimientos ni discernimiento no reconocería que es un tesoro inapreciable, e incluso podría arrojarlo otra vez al océano, como si fuera una basura.

Pero alguien con conocimientos y discerniniento se tomaría el tiempo y la paciencia y con mucho cuidado quitaría todos los crustáceos adheridos. Tomaría muchas semanas revelar siquiera la parte más pequeña del tesoro, pero el que sabe no dejará que nada lo desanime hasta haberlo limpiado completamente y éste se encuentre ante él con su verdadera belleza y perfección.

Lo mismo ocurre con una persona. En cada persona se encuentra esa verdadera perfección, esa chispa de Dios. Es posible que esté irreconocible, con toda la basura que la cubre; pero el que sabe, el que es sensible, ve en la profundidad más allá de toda la confusión de la superficie eso que es la verdad, y con gran amor, paciencia y perseverancia quitará poco a poco todo lo que está estropeando la belleza de esa persona, hasta que se contemple la perfección y esa persona se muestre con toda su gloria y sepa que está hecho a MI imagen y semejanza que es una Conmigo. 

Eileen Caddy. Los cimientos de Findhorn.

martes, 25 de septiembre de 2018

PASOS IMPORTANTES

Ya finalizo el verano y con él hemos cerrado una temporada de agobios y presiones energéticas que empezaron por el mes de Mayo. El cierre ha sido intenso, tal vez para valorar con más placer la frescura del nuevo ciclo.

La tan esperada nueva energía ya está entre nosotros, aquí en Gaia. La frecuencia vibratoria del planeta ha aumentado bastante, lo que provoca un estímulo de avance y apertura en todos nosotros.

La energía que nos envuelve, que respiramos y que rige nuestra vida es menos densa, más fluida, más rápida aún. Lo notamos en más percepción, más sensibilidad, la mente más despejada, más necesidad de vivir a nuestro gusto, de acercarnos a la naturaleza, al mar, podemos sentirnos invadidos de pronto por tristezas y añoranzas, vernos en otros tiempos y otras vidas, sentir inexplicables atracciones y rechazos hacia otras personas, enamorarnos de la vida, de nosotros mismos. 

Sin embargo, si ha quedado algo por pulir, por sanar en nuestro corazón ahora será el momento en que deberemos hacerlo si queremos seguir el ritmo que marca el universo. Sino nos podemos quedar rezagados. Ya no hay tiempo para esperar el "mañana lo haré". 

Cada vez más y más personas van despertando de un letargo espiritual. Y hay que encontrar la verdad que cada uno lleva dentro. No es tiempo de que alguien piense por ti, es tiempo de pensar por nosotros mismos la mejor forma de encontrarnos con nosotros mismos. Siempre hay una guia esperándote por si la necesitas, el universo nunca nos deja solos, pero ahora se hace más efectiva que nunca la frase de "si tu no te ayudas el cielo no lo hará" o bien al revés "el cielo te ayuda si tu lo haces primero".

Empezamos a descubrir la vida, la verdadera vida, las nieblas que nos envolvian poco a poco se van disipando. Y el paisaje que descubrimos no es otro que el de nuestro corazón.

Con paz y amor.
Maria Angels

viernes, 14 de septiembre de 2018

TRABAJO EN COMUN




El Espíritu y la personalidad están destinados a trabajar juntos en una misma dirección. Para ello cada Espíritu se comunica o relaciona de manera única con la personalidad. Por lo que no hay patrones establecidos. Cada persona debe encontrar la forma de comunicación o relación con su Espíritu por si misma.

Un buen ejemplo para entender mejor esta situación es imaginarnos a nosotros mismos remando en un bote de remos. En un remo está el Espíritu y en el otro la personalidad. Si cada remo va hacia donde quiera, nunca se llegará a lugar alguno, porque no hay entendimiento ni escucha de ningún tipo. El único que sabe donde ir es el remo del Espíritu, que es quién debe marcar el camino, si la personalidad entiende esta sabiduría que va más allá de un entendimiento racional, lo acata, lo respeta y lo acepta se deja guiar de manera que rema en la dirección adecuada con la ayuda y estrecha colaboración de su Espíritu. 

El Espíritu cuida, respeta y acepta las limitaciones de la personalidad porque las comprende. No es una dominación del uno sobre el otro, en el que uno mando y el otro obedece, sino que se complementan, se nutren el uno al otro, de ese modo se permite la evolución de ambos, porque se respetan  y buscan entre ellos un punto de equilibrio que los beneficie a los dos. Al Espíritu y a la personalidad. No hay imposición del Espíritu se buscan acuerdos comunes. 

Para que esto pueda ser asi debe haber un compromiso hacia uno mismo, de ambas partes, la parte humana y la parte divina. Una entrega y confianza hacia el otro. De ahí la importancia del crecimiento personal
como humanos y el ir evolucionando y creciendo como Espíritus. 

lunes, 3 de septiembre de 2018

APUNTES SOBRE EL ESPIRITU




 El Espíritu evoluciona. Vida tras Vida. Es decir aprende. De la misma manera que un ser humano nace siendo un bebe y con el tiempo crece y se desarrolla, aprende a andar, luego a hablar, a comer solo, se hace un  joven y luego un adulto. Con lo que aún y siendo la misma persona su expresión de cuando es un niño es muy diferente a cuando es un adulto.

A diferencia de la personalidad, el Espíritu tiene unas etapas de aprendizaje mucho más largas en función de su habilidad para aprender.

Los Espíritus son portadores de Luz por naturaleza. Pero al igual que las personalidades también tienen sus características particulares, los hay más jóvenes o más maduros en función de lo que hayan aprendido. Pueden ser más o menos tercos, más o menos generosos, más o menos agradables. Habrá que tengan más Luz que otros, aunque todos tengan su Luz, su intensidad y su brillo dependerá de como haya sido su trayectoria evolutiva. 

domingo, 29 de julio de 2018

MOMENTOS DE GAIA





                      MOMENTOS DE GAIA  

Después de unos días de silencio, siento  que es el momento de volver a contaros cosas.

Llevamos un verano movidito, tanto en calor como en altibajos emocionales, cansancio y algunas cositas más que no es necesario mencionar porque cada uno, ya tiene capacidad para pensar por si mismo y reconocer lo que vive.  Si os acordáis antes de cerrar el curso ya advertí de la intensidad de la energía que vive el planeta, nuestra Madre Tierra.

La Tierra es un ser vivo, no es una masa de materia. Es un Ser Cósmico llamado Gaia que se ofreció hace muchísimos millones de años terrestres a encarnar en forma de planeta. Y de la misma manera que un bebe es concebido como un granito de arena pequeño y con un estallido de Luz, Gaia encarno en un estallido de Luz pasando lentamente, a través del tiempo, a formarse como un planeta habitable para los seres humanos.

Gaia fue creada para albergar la Vida venida de todo el Universo, creada para albergar información viva, como en una gran biblioteca de la Vida  con conexión con todas las dimensiones y con los Seres que en ella habitan.  Es un planeta de gran diversidad de vida, toda inteligente y perfectamente comunicada entre ella. Aunque gran parte de esa comunicación se haya olvidado, poco a poco se irá restableciendo.  Dicen desde el Cielo que hay pocos planetas que den los dones de la Tierra. Como nosotros los seres humanos, Gaia tiene sus venas, sus centros, sus glándulas, sus órganos que palpitan, siente, ama. Es fuerte y dulce, suave y contundente, protectora y justa.
Es nuestra Madre.  

Han pasado eras de tiempo, ciclos y ciclos. Grandes y pequeños. Han pasado civilizaciones enteras, algunas se conserva recuerdo, de otras no. En el gran ciclo que se cierra ahora poco a poco la humanidad ha ido olvidando que está sostenida por la Madre Tierra. De vez en cuando Gaia manifiesta que está viva y es un ser que siente con algunos temblores, inundaciones, cosas que, aparentemente, pasan desapercibidas, cambios climáticos, poca importancia parece.  Al final de cada gran ciclo,  Gaia se manifiesta  de una forma más evidente, más aparente. Tal como está sucediendo ahora.

Los grandes aspectos planetarios que hemos vivido durante el mes de Julio más los que vivimos esta semana con la Luna, más la apertura de la puerta del León el 8 de agosto, más el eclipse del 11 de agosto, son puertas que actúan para dar fuerza a la manifestación del planeta. Estos aspectos no sólo nos estimulan a nosotros como humanos en nuestra evolución sino al conjunto del planeta entero.

Todo lo dicho es para recordaros y pediros que os mantengáis en equilibrio constante, con la intención puesta en todo lo que la Luz nos aporta.  Tal como os he enseñado. Ahora es el momento de practicar. Hay noticias que no se dan por la televisión y apenas salen en los periódicos, más bien hay cuidado en que sean disimuladas, para no asustar. Sin embargo no es momento para temer, sino que es momento para amar, perdonar, ayudar y seguir.

Un fuerte abrazo de y en la Luz.
María Angels





viernes, 6 de julio de 2018

LA MAGIA DEL AMOR

                                                         



“El amor es un bálsamo que contiene el poder de curar y renovar. Es la llave de todas las puertas”. Eileen Caddy.

A los seres humanos nos llega el conocimiento real, a medida que somos capaces de entenderlo e integrarlo. Ni antes ni después pues sería desperdiciado y mal usado. Así el conocimiento se abre paso en nuestras conciencias como una flor que se va abriendo al sol, hasta que esta totalmente madura y abierta, luego sus pétalos caen al suelo nutriendo una nueva floración.

Así mismo es el corazón humano. Poco a poco se va abriendo al sol del Espíritu y su motivación es la búsqueda del amor. Sin embargo la belleza del amor es tanta y tan potente y delicada que no se puede definir ni encerrar en adjetivos como “mío”. Mayormente la palabra amor va asociada a las relaciones entre las personas. Cuando se habla del hijo o la hija se dice, “mi hija, mi hijo”, indicando y dejando muy claro a los demás que el amor del hijo-hija sólo pertenece al padre o la madre. Cuando se nombra a la pareja se deja claro “mi mujer, mi hombre”.

Cuando se siente atracción hacia otro ser humano, enseguida se le pretende encasillar en un “mí”, significando un “te quiero para mi”. Como un tesoro que se quiere acaparar, que se enmarca en un cuadro, o se coloca en una jaula donde se contempla y se goza de su belleza. Pero en realidad lo que se hace es limitar su brillo, con el tiempo su belleza se apaga y su fuerza se agota.

El amor es la esencia de la vida, el motor por el que nos movemos o bien buscándolo o bien disfrutándolo o bien dándolo. Y debe ser libre para moverse, para brillar, para dar y para recibir. Nadie es dueño de nadie, nadie puede poseer para sí solo el secreto de la vida. Las normas, los dogmas, las religiones intentan y lo han logrado, definir el amor, enmarcarlo en sus manifestaciones,  para así preservarlo para si. Quizás ignoran que el amor tiene múltiples facetas en su manifestación, que cada persona emitirá hacia otra una o varias de estas facetas y necesitara recibir también para si misma algunas de ellas Porque estas manifestaciones del amor son la nutrición que el Espíritu necesita en su ciclo de vida, tanto humano como divino. 

En el estado de evolución espiritual de otras civilizaciones, de otros lugares planetarios, y en la tierra en algunas personas, más a nivel intelectual que práctico;  se vive y se entiende el amor como el pegamento que une la vida entera tanto de la tierra como planeta y como la evolución que en ella se da. El hilo conductor que a todos nos une y a todos nos nutre, convirtiéndonos y haciéndonos partícipe del Todo lo que Es. Sentir, saber, vivir, de forma totalmente natural que formamos parte de Dios.  Por lo tanto el apego, el “mio”, la posesión no existe. El apego limita, condiciona, restringue y por consiguiente retrasa la evolución y corta la creatividad.

Cuando el amor es libre, no condicionado, enriquece y nutre al que lo recibe. Lo sostiene en tal forma que su vida  como por arte de magia cambia de color gris a la brillantez y luminosidad de los colores que aportan nuevas  oportunidades, nuevos proyectos,  las soluciones, la alegría, la fuerza, la inspiración, entre otras muchas cosas. Pero cuando se rechaza el amor por no poder poseerlo o se le pone el sello de “mio”, la magia que envolvía a la persona se corta, ya no hay nutrición, y los colores   poco a poco se apagan y todo vuelve a ser gris.

El concepto de poseer solo esta en la mente, pero nunca en el corazón. Así cuando aprendemos a vivir desde el corazón aprendemos, poco a poco a dar libertad al amor tanto en el darlo, como en el recibirlo, y el concepto de posesión se cambia al de permitir, permitir que; “ el amor que siento en mi por ti circule libremente entre tu y yo y nos enriquezca aportando a cada uno de nosotros el alimento, la nutrición que nuestro Espíritu necesita”.

Cuando el amor se limita al “mío”, hay celos, miedo a perder, inseguridad, recelo. Y todo acaba siempre en dolor emocional y espiritual, porque hay “carencia de nutrición espiritual”. En la posesión se intenta llenar la carencia, pero hace el efecto rebote, la carencia crece. Porque ella no es más que la necesidad de nutrición que tiene el Espíritu.

El amor como hilo conductor de nutrición y conexión de la vida entera aparece en todos los seres humanos, entre  personas de diferente sexo, de diferente raza, de diferentes condiciones y estados, cuando se le deja libre mediante el reconocimiento abierto y sobre la base de la confianza; cuando se lo deja manifestar en cualquiera de las facetas que necesite hacerlo; cuando no se le confunde con el deseo personal sino que se le reconoce como lo que realmente es entonces la energía de una persona complementa a la de la otra y viceversa, y ambas personas recibe la gracia del amor, el  toque de magia en sus vidas. Si se la acepta  y se la deja en libertad la magia permanecerá en la vida de ambas personas. Si se la rechaza o se la etiqueta la magia se apagará.

Esto es para Espíritus maduros, de mente abierta y corazón puro;  grandes almas con capacidad de cambiar su comprensión  del amor y capaces de  elaborar una base de confianza en si mismas y en las personas por las que se sienten atraídas.  Sobre esta base de confianza, el corazón de ambas personas florece en función de recibir y dar. Tal vez alguien necesite de alguna faceta en particular que no tiene y sin embargo necesita, entonces su propia confianza atrae hacia ella la manifestación del amor que necesita para su nutrición.

María Angels.






viernes, 29 de junio de 2018

UN APUNTE SOBRE LA INTUICION

                                                           

Voy a darle este enfoque. Como personalidades humanas muchas veces no sabemos como resolver nuestras dudas o  cuál es la decisión adecuada a tomar. Entonces podemos intuir, es decir, sentir desde el corazón o comprender una solución en su totalidad, sin razonamiento.

La intuición podemos entenderla como una inspiración del Espíritu a la misma personalidad para darle orientación sobre cómo debe seguir. A veces los guías o facilitadores como prefieren que les llamemos pueden intervenir, si antes el Espíritu lo ha pedido, pero sino es él, el Espíritu quién se comunica sutilmente con su otro ser la personalidad humana.

 Cuando la unión del Espíritu con la personalidad está establecida, se irradia directamente al corazón o a la mente, es entonces que los guias pueden utilizar los canales mentales de la personalidad, de esta forma todo se acelera.

Es una comunicación para clarificar dudas e ir más directos hacia donde el Espíritu quiere llegar. Mucho tiempo y esfuerzo le ha costado llegar a la unión, así que cuando se produce, se recibe toda la ayuda posible para llegar a su propósito de vida.

Entendamos que no puede producirse antes de que la personalidad esté limpia y equilibrada. Si así no fuera el mensaje-intuición vendría del deseo de la persona, no del Espíritu ni de los guías. La persona cree que son los seres de luz pero en realidad es ella misma, sus mismos deseos. Es entonces cuando pueden producirse los desequilibrios de personalidad.

Para evitarlos el proceso debe ser observado, sanado y orientado por el propio Espíritu ayudado y apoyado por los guías. Esto no es hoy para mañana, lleva su tiempo, que en cada persona es distinto porque distintas son sus circunstancias y necesidades de evolución.

María Angels

lunes, 25 de junio de 2018

NOTAS SOBRE EVOLUCION





Muchas veces he hablado que somos una parte humana, la personalidad más el cuerpo físico y una parte divina, nuestro Espíritu, nuestro Ser Interno como queráis llamarlo.

No sólo evoluciona nuestra personalidad, que vida tras vida, se hace más perfecta, se pule, obtiene más conocimientos a nivel consciente. Nuestro Espíritu también evoluciona y por ello necesita de su personalidad, que es su soporte.

El Espíritu tiene muy claro donde quiere llegar, cuál es su Propósito y vida tras vida se pone a ello, por ello a medida que la personalidad se pule y se hace más adecuada a sus propósitos le es más fácil acoplarse o unirse a ella para así poder tener un vehículo adecuado y preparado para llegar donde se ha propuesto.

En principio la personalidad no es consciente del propósito del Espíritu, porque esta sujeta a muchos condicionamientos, sean sociales, familiares, heredados de los ancestros, de salud;  pero a medida que se pule, si se hace consciente de hacia donde quiere ir, que quiere aprender, y sin que comprenda el porqué ni el cómo, es conducida hacia lugares, personas o circunstancias en las que a través de la experiencia y vivencia personal poco a poco va sintiendo lo que su Espíritu espera de ella.

La personalidad siente que hay algo más fuerte y grande que tira de ella. Y queramos o no tenemos que seguir adelante. Es como subirse a un tren, cuando se pone en marcha ya no nos podemos bajar.

Pero así como la personalidad se pone enferma, se cansa, o se encabezona en algo, también el Espíritu puede cansarse, enfermarse o bloquearse. Los guías estamos aquí para socorrer, asistir a los Espíritus cuando la unión cuerpo-divinidad no se realiza, para alentar, dar fuerzas y vitalizar al espíritu para la siguiente vida o para cuando la unión esta establecida, facilitar un rápido despertar y aprendizaje de la personalidad.

Cuando la personalidad esta pulida es bella en el sentido de sencilla y se entrega voluntariamente a su Espíritu, es cuando hay la unión consciente a uno mismo, la entrega y el compromiso a uno mismo,  que surgen los guías.


 María Angels




lunes, 11 de junio de 2018

UN CUENTO DE AMOR

                                                         


Una vez la gran Diosa Madre del Universo  miro a la tierra y al ver su belleza se enamoro; miro a los espíritus femeninos  y los vio sufrir, envueltos en oscuridad. Fundida de amor   suspiró y   en su exhalación expandió de su corazón millones y millones de partículas de si misma. Cada partícula era una parte de su esencia,  todas  fueron a la parte femenina de los   corazones de la humanidad,  hundiéndose en él para ocultarse de la realidad de los hombres.   

Con el tiempo esas partículas se asentaron y  empezaron a  irradiar más y más luz, hasta que un día el corazón empezó  a palpitar diferente, ya no latía como el de un humano cualquiera, ahora pulsaba con la seguridad de una diosa.

La mujer empezó a sentirse diferente, empezó a amarse a si misma, empezó a respetarse a si misma; entonces quiso conocer que había en su corazón que la hacia tan diferente. Y limpió y limpió toda la oscuridad que la envolvía. Pero aún no veía que  había en su corazón.

 Este pulsaba más fuerte aún, tan fuerte que  causaba dolor en el pecho,  la mujer doblo sus rodillas y cayó al suelo. Entonces toco la tierra y sintió que  también pulsaba con ella, las   lágrimas  brotaron de sus ojos,  todo era una sola pulsación a un mismo ritmo en una continua  expansión de amor en forma de luz  y de  color.  Su corazón se abrió y la naturaleza la Diosa se reveló.

Comprendió la mujer, que ella solo era parte de un todo más grande y  como en un sueño entró en su corazón. Allí descubrió que  ella formaba parte de la esencia de la Gran Diosa Madre, que solo buscaba expresarse a través de ella. Lo que la hacia distinta era ser receptáculo de la Gran Diosa Madre.

Así miles y miles de mujeres en todo el planeta vamos despertando a nuestro verdadero valor para dar expresión personal a la parte de esencia divina de que somos portadoras.
Todas somos parte de la Diosa.  Todas las diosas habidas y veneradas en la tierra en todos los tiempos, son parte de la Gran Diosa. Todas las vírgenes son parte de la Gran Diosa, toda mujer, todo espíritu femenino, es parte de la Gran Diosa.

El camino es el del corazón.

Maria Angels