Ligero comentario sobre muchas de las cosas que hacemos sin darnos cuenta de su valor.
Un ritual es una serie de movimientos, de pasos, de acciones, enmarcados dentro de un simbolismo de color, incienso, velas, flores, música, sonidos, ritmos, frutas, minerales....
El ritual unido a la intención, a la consciencia y a la voluntad del practicante ayudan a acceder a espacios de conciencia superior en nuestro interior. A cada paso, a cada movimiento se crea un magnetismo que nos acerca a un mayor reconocimiento del sentido sagrado-divino nuestro.
Entiendo como ceremonia el mismo acto de hacer el ritual. Un ejemplo sencillo; encender una vela con una finalidad puesta en mente.
El significado del ritual tiene que encontrar su lugar en nuestra vida en general y en particular en nuestras mentes y corazones. Ceremonia y ritual quedan englobados en un mismo hacer, puede ser una ofrenda, una oración, puede ser cualquier cosa que salga del corazón, pero que sirva para recordar que en nuestro interior hay un altar sagrado i es delante de nuestro altar que nos inclinamos.
A veces sobran las palabras y se expresa el rito.
A veces las palabras refuerzan el rito.
A veces es el rito que refuerza las palabras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario