NOTA DE MI DIARIO SOBRE EL AMOR
Ultimamente
he tenido varias consultas de personas heridas en su corazón por lo que
entienden que es el amor, más concretamente el amor de pareja. Eso me ha hecho
pensar en mi misma, como lo vivía tiempo atrás y he buscado en mis notas, en
mis recuerdos y esto es lo que he encontrado. A veces guardar los diarios sirve
para algo, como hoy que lo comparto. Creo que pueden ir bien a alguien.
Dicen……
“¿Cuántas
personas experimentan en su vida tanto como dadores como receptores el amor
incondicional?
¿Cuántas
personas experimentan la dulzura y el cariño del amor desprendido? Sin pedir ni
dar nada a cambio.
Aunque lo
que veas te haga creer que no las hay o las hay muy pocas, lo cierto es que sí
que las hay y más de lo que crees. Simplemente tu no las ves.
Te han
enseñado que el amor se define como preocupación por los demás, miedo a perder
a ciertas personas, retener a una persona porque eso te hace sentir bien, lo
que sientes por alguien cuando te hace sentir bien, cuando satisfacen tus
necesidades, cuando te valoran, cuando tú tienes pena o lástima de los demás. Has visto como
ejemplo ante ti buscar el amor
despertando lastima en el otro a través del pobre mi…. Eso no es amor.
A veces te
da pena alguien y dices “pobre”, como una forma de compadecerte de él. Sin
embargo, eso no es amor, es quitarle el poder personal a esa persona, porque
esa lástima colabora en afirmar su incapacidad para ayudarse a si mismo. No
dejes de amar, ten compasión, pero no niegues al otro la capacidad de aprender,
crecer y cambiar su vida al sentir pena por el.
Existe
bastante diferencia entre las definiciones de amor divino y las definiciones
que la sociedad o la familia dan al amor. Desde muy niña aprendistes que si
querías amor tenías que hacer lo que tus padres querían y esperaban de ti. O te
adaptabas a este comportamiento o te rebelabas, rechazando así el amor. En
cualquier caso, redujo tu capacidad de recibir amor divino, quedó completamente bloqueada a causa de
entregarte al juego de competir por la energía y la atención de los demás.
Ya de
adulta, el no haber entendido la naturaleza del amor se traduce en esperar
cosas poco realistas de la pareja y de los amigos. Si alguien no te hace caso
cuando crees que debe hacerlo, supones que te ama poco. El no te coge la mano,
ni te besa, ni te dice lo que quieres oír cuando tú lo quieres y eso hace que
le acuses de que te ama poco porque no se anticipa a lo que quieres y
necesitas.
Hoy la
mayoría de los humanos habéis olvidado que debéis elegir pareja y amigos
íntimos entre aquellos con quienes sois más compatibles. Aquellos hacia los que
se sienta amor y cariño de modo natural y que de modo natural correspondan a
esos sentimientos.
Al
contrario sois muchos los que entablais relaciones ligadas al sexo o amistades
con personas antes de conoceros, antes de que cada uno comunique al otro sus
necesidades y deseos, antes de que se establezca una mínima compatibilidad.
Después duele que el modo de amar del otro no responda a vuestras expectativas,
en lugar de verlo simplemente como otra manera de amar, echais las culpas y
acusáis al otro de amar poco. Puede que algunos amen poco y puede que no. Es
importante que te des cuenta de que es tuya la responsabilidad de utilizar con
discernimiento y de elegir con juicio.
No quieras
verte en medio de una relación en la que alguien sea minusvalorado. Debéis
apreciaros unos a otros y si no sois capaces de ello con ciertas personas, no
deberíais relacionaros con ellas.
A causa de
todas estas malas comprensiones sobre el amor, es posible que un ser humano
renuncie o cierre su capacidad de recibir amor divino, puede que incluso haya
miedo a aceptar la alegría del amor verdadero porque se asocia con ceder el
control, sentir dolor, desilusión o volverse dependiente.
El amor en
su forma pura nada tiene que ver con el miedo, la resistencia, la pérdida, el
control, el dolor o la dependencia. Cuando esas desarmonías aparecen en tu vida
en forma de amor, tienes el deber y la responsabilidad de examinarte
profundamente, porque eso magnetiza hacia ti más de lo mismo.”
Un gran
abrazo a todos.
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